Hace un año, las empresas del sector acudían a nosotros en busca de una solución que les ayudará a gestionar mejor su gran carga de trabajo diaria. Buscaban contar con el apoyo tecnológico de una herramienta que les permitiera optimizar sus recursos para poderlos consultar en cualquier momento y lugar, y sobre todo, que les simplificara todo lo posible las tareas para, en definitiva, poder hacer más en menos tiempo.
Pero había un principal escollo en el camino: ¿Cómo rascar minutos a un día ya saturado de por si para probar un nuevo sistema de gestión?
Era sin duda, todo un reto logístico al que hacer frente, pero esperaban verse recompensados a largo plazo. Y muchos, de hecho, nos lo confirmaron después.
Sin embargo, también estaba la otra cara de la moneda: empresas que se entusiasmaban ante las posibilidades a la vista, pero que, tras cierto tiempo, nos comunicaban que su volumen actual de trabajo les impedía poder implantar un software de gestión en la empresa. Un caso en toda regla del típico problema del pez que se muerde la cola.
Un año después, aunque entonces hubiera parecido inimaginable, las horas del día ya no faltan, empiezan a sobrar. Y precisamente por ello, este puede ser el mejor momento para plantearse realizar muchos de los cambios que llevas tiempo queriendo hacer pero que antes el día a día no te dejaba.
Así que, si la digitalización es todavía la asignatura pendiente de tu empresa, esta es una ocasión que no puedes dejar pasar.
Pero, si con todo, este no te parece suficiente motivo, en Volcano te aportamos 3 razones más que a lo mejor no habías pensado:
1 – Porque ahora podrás testear a fondo diferentes programas para buscar la solución que más se adapte a tus necesidades. Y no tirarte a la piscina con una primera impresión superficial.
2 – Porque podrás aprovechar para hacer limpieza de tu base de datos de clientes y proveedores y para revisar y actualizar la información de tus vehículos, tus trabajadores y tu empresa. De esta forma, tus datos estarán mejor organizados y podrás consultar lo que necesitas de forma más rápida.
3 – Porque tus trabajadores podrán adaptarse mejor a la nueva tecnología y sistema de trabajo. Al no tener la presión de sacar tanto trabajo adelante, podrán formarse de forma más pausada e incidir en las cuestiones que crean más relevantes. También, se verán más proclives al cambio e incluso más proactivos en la búsqueda de obtener mejores datos analíticos o de nuevas soluciones a problemas frecuentes.